Informacion proporcionada por Jose Tristan
APUNTES SOBRE LA
HISTORIA DEL MERCADO CRISTOBAL COLON.
POR JOSE GUILLERMO
ALVARADO OROZCO
El terreno que ocupa el Mercado Cristóbal Colon, formo parte
por más de doscientos años de la milpa del convento de Santa Catarina Virgen y Mártir
del rio verde.
Dicha milpa abarcaba la extensión de once almudes de terreno
de riego y tenía los siguientes linderos:
Por el norte con el primitivo cementerio parroquial, hoy Plazoleta
de la Fundación, y se unía en el tramo de la calle Colon, inexistente en esa
época, en el costado derecho de la casa cural y testera de la iglesia; por el
sur con la calle bravo; por el oriente con la calle Iturbide y, por el poniente
con la de Morelos.
En el plano que Ignacio Sáenz levanto en 1874, aparece como enorme
cuadra la posesión descrita y, atravesando esta, delineo la acequia del
convento, después conocida como la de san juan, que era utilizada por los
venerables franciscanos para regar su sementera. Hoy en día continúa corriendo
su cauce bajo las losas del pavimento y los cimientos de las construcciones
modernas.
La promulgación de la ley de desamortización de bienes
eclesiásticos, si mal no recuerdo también llamada “ley lerdo”, despojo a la
parroquia de su milpa, facilitando su compra a don sostenes Escandón, opulento
hacendado y político liberal, que en varias ocasiones ocupo la gubernatura del
estado.
En el mes de enero de 1877, el honorable ayuntamiento
encabezado por el jefe político Dr. Lauro islas, tuvo la inquietud de
solucionar el problema de freno urbano que representaba ese enorme tapón, por
lo que llevo a cabo las acciones legales para adquirirlo de la Sra. Flora
Pando, viuda de don Sostenes Escandón, a fin de formar un nuevo cuartel anexo
al barrio de san juan.
El barrio naciente se conoció en sus orígenes como “barrio Nuevo”.
“Barrio de Tuxtepec” y popularmente como de “Cantarranas”. Esto debido a las
plagas de batracios que lo invadían en época de lluvias. El eje o calle
principal tuvo el nombre de “Calle Nueva”, y después tomo el nombre de “Calle
Dr. Islas”.
Por los años del porfiriato, en la manzana comprendida entre
las calles de Jiménez, colon, Dr. Islas y Morelos, lugar en donde ahora se
ubica el Mercado Cristóbal Colon, su propietario el Dr. Eleno cervantes González,
construyo un tivoli ornamentado con naranjos para recreo de las principales
familias de la época.
El Doctor Cervantes falleció el 16 de abril de 1934,
habiendo heredado en vida a su hija Raquel Cervantes de Quesada la media
manzana que las circunstancias destinarían para que en tal sitio se levantara
un moderno mercado.
Con el fin de hacerse de una renta productiva que le
proporcionara la excelente ubicación del espacioso terreno, la Señora Cervantes
lo arrendo a doña Demetria Rico, para que instalara un mesón con sus respectivo
corrales.
El día 6 de abril de 1959, doña Raquel, deseando cooperar
para el mejoramiento de su pueblo natal, cede a bajo precio el predio para que
se construya el mercado. Realiza las gestiones el Presidente Municipal don
Adolfo López Díaz (Administración 1959-1961).
En el mes de noviembre de 1961 entra en funciones el nuevo
mercado, procediendo al derrumbe del antiguo en el atrio de la parroquia, para así
obligar a los comerciantes a mudarse.
En un principio fue de lujo por su moblaje de vitrinas, pero
resultó un fracaso debido a la escasa población y estancamiento de la zona en
todos los aspectos; aparte era muy caluroso pues carecía de la ventilación
adecuada para el clima y esto facilitaba que los productos se descompusieran más
rápidamente. Llevaron a cerrar, en su momento, casi la mitad de los locatarios.
La placa alusiva a su inauguración, cuando era Gobernador
del estado el Prof. Manuel López Dávila, fue removida hace algunos años, para
colocar en su espacio la serie de contadores de energía eléctrica de los
locales.
El plano del proyecto del Mercado Jiménez, cuyo primigenio
nombre fue cambiado al de Cristóbal Colon, se encuentra en poder del Ing.
Salvado Alejo López, y es posible que el citado profesionista abunde en más
datos, como pueden ser el nombre del proyectista, costos estimado, etc., etc.,
pero sobretodo rectificar la fecha de su inauguración que se desconoce-
Atte. Y firma
JOSE GUILLERMO ALVARADO OROZCO.