Lamberto Olivo Álvarez, Recuerdos.

De plática amena y fácil nos compartió algunos de sus recuerdos.

Nací aquí en Rioverde el 29 de septiembre de 1926 eso fue en la Ave. Centenario no. 103 atendió a mi mama en el parto la Dra. Mercedes Escalera la cual era hermana de don Gil Escalera el que fue Director de Telégrafos de Mexico aquí en Rioverde, soy descendiente de Don Pedro Hernández Vega según eso mi padre era hijo natural como yo también lo fui, mi abuelo era hermano de don Flavio Hernández el Padre de Don Pedro Hernández y mi padre se llamaba Antonio Álvarez, mi padre nunca me reconoció nos conocimos hasta cuando yo tenía 27 años ya en ese entonces no me nació nada por el pues lo vi como cualquier cosa y jamás nos volvimos a ver, yo a la que reconocía era a mi madre estuvo conmigo hasta que la deje en el panteón.

Mi infancia la viví muy feliz al lado de mi prima a la cual yo miraba como mi hermana aunque fuimos dos hermanos pues a los 6 años nació mi hermano que se llamaba Eduardo también atendído por la señora Escalera, esta Señora tenía su consultorio y su farmacia en la calle de Porfirio Díaz y centenario no exactamente sino adelantito y toda esa casa era de la familia escalera.

Mi prima fue además compañera de escuela, ella entro primero a la escuela que era la numero 4 como le llamaban a la Sor Juana Inés de la Cruz, recuerdo que  en aquel tiempo la directora era María Luisa Velarde  después el siguiente año ya mi madre mi inscribió en el colegio de las monjas que era el Colegio Ignacio Zaragoza el cual estaba situado en la calle que hoy se llama mollinedo esquina con el callejón “pasaje allende” ahí estaba el colegio, ahí hice mi primer año el siguiente año se cambió el colegio a la siguiente cuadra por sobre reyes casi enfrente de los chessani y luego se cambió a donde está ahorita Copel ahí estuvo y después se terminó; en ese lugar despues fue la central camionera lo que era conocido como vencedor.

Yo viví muchos años siempre al lado de mi madre y mi abuela, cuando termine la primaria entre a la secundaria federal que estaba a un lado de la presidencia, ahí termine hasta 2º. Año de secundaria y el primer director que hubo fue el Ing. Rafael López Romero y enseguida fue el Dr. Gama después supe que la Maestra Esther Méndez López también fue Directora de ahí

De esa generación recuerdo con cariño a mi gran amigo al Doctor Carlos Gama, a Ricardo Castillo el papa del Cronista de la Ciudad, al coño José Víctor García que era hijo de don León García el dueño del hotel Santander, otro compañero también de ese mismo grupo era Joaquín Zapata dicen que ya murió y él era entenado de un carnicero que tenía las carnicerías ahí por la Zaragoza cuando era el mercado ahí porque en ese lugar fue mercado en un tiempo.

En la secundaria conocí a un amigo que hicimos una amistad no común y corriente era una amistad fraternal nos veíamos como hermanos desgraciadamente él tiene 3 años que murió en san Luis potosí él se llamaba Carlos Garrocho Sandoval él era de ciudad valles pero su familia era de aquí de Rioverde a él lo mandaron de valles a estudiar acá la secundaria y asi hicimos esa amistad que perduro hasta que murió, en ese tiempo nuestros juegos eran las canicas, el balero, el yoyo y también nos gustaba salír al campo a matar pájaros y lagartijas con la resortera, también participábamos en los torneos de volibol que era lo que se jugaba a nivel escuelas; ya se empezaba a vislumbrar el beis bol que se jugaba en los ángeles donde íbamos a ver jugar a los equipos, recuerdo a jugadores como el Kalfor, a chonillo del bar superior, a la jiji Román que era segunda base, a la kokena Jorge akel; ellos eran los jugadores estrella de aquel tiempo; el futbol todavía no figuraba aquí el futbol lo trajo el dueño de la farmacia cruz roja el sr. Orozco fue el que empezó a meterlo y otro Sr. Que no recuerdo su nombre que acaba de morir que trabajaba en teléfonos ya de bastantes años.

Ya de ahí cuando me Salí de la escuela empecé a acompañar al administrador de las huertas de don Pedro Hernández que era don Teodoro Rostro, me quiso mucho y lo acompañaba yo todos los días en la mañana a recorrer las huertas que estaban ubicadas en la cruz del mezquite, en el Refugio que en aquel tiempo se llamaba callejones, una vez vi trabajar en el tractor a su hermano y se me ocurrió subirme con él y le dije: -préstamelo- y me lo presto, me gustó tanto que le dije: -dame chance de manejarlo- y  que acepta, que me deja solo y ya cuando se iba Teodoro me dice: -nos vamos?- Y le dije: -deme chance de quedarme-, me gustó tanto que otro día ya estaba yo ahí y al termino de la semana cual va siendo mi sorpresa que me regala 10 pesos, en ese tiempo esa cantidad era una fortuna para mí y asi estuve mucho tiempo trabajando en las huertas tanto en el refugio como en la cruz del mezquite y en la calle centenario las 2 huertas que tenía don pedro Hernández; pero hubo el problema que periódicamente paraban a los tractores para hacerles mantenimiento y pues nosotros nos quedábamos sin trabajar entonces se me ocurre ir a ver a don Agustín verastegui hermano del que fue también cronista de la ciudad don Eugenio Verastegui y del güero Bernardino le fui a pedir chamba y como ya me conocía me dijo: -si, si vente entre a trabajar- con el ahí estuve trabajando casi tres años pero tuve una dificultad con su hijo que era muy malora y me corrió don Agustín y pues anduve mucho tiempo sin trabajo me dedicaba yo a la vagancia con mis amigos hasta que un día me invita el chino solis a trabajar a su taller y le gustó mucho mi trabajo tanto que me quede con el casi 7 años ahí conocí a mi compadre Jesús Alvarado primo de Chuy él era hijo de Don Bricio tío de Chuy él era un gran hombre me enseño a muchas cosas hasta chupar (tomar) gracias a el soy lo que soy fue para mí un amigo, un compañero y casi casi un padre porque me guio por el buen camino; desgraciadamente ya después lo perdí porque se fue para Tampico y ya no lo volvimos a ver, ya de ahí yo agarre mi trabajo me independice empecé a trabajar por mi cuenta desgraciadamente en aquel tiempo Rioverde estaba en pañales había poco tráfico y muchos talleres me vi en la necesidad de tener que emigrar ya tenía yo familia y me fui al distrito federal

Mi oficio era hojalatero pintor automotriz y de eso fui a buscar trabajo y cuál va a ser mi sorpresa que me encuentro en la calle al hijo de don Pedro Hernández a Pedro Hernández chico me ve y como ese señor me trataba como hijo y dijo: -que estás haciendo por acá hijo-, -pues ando consiguiendo trabajo don pedrito-, -y de que trabajas-, -pues de hojalatero pintor- -¡ha! pues mira este taller es de mi primo y él tiene un negocio aquí de carros vente-, ya me llevo me presento con él y al otro día ya estaba yo trabajando ahi estuve como 2 años, después llego mi compadre Alvarado y nos juntamos y pusimos el taller y de a ahí para adelante poco a poco fuimos progresando, no me quejo pues me fue muy bien en ese taller el cual lo teníamos en la colonia Aragón a un ladito del santuario de Guadalupe, todavía en aquel tiempo estaba muy solo ese lugar, aun le decían la villa, no había progreso hoy ya es la Gustavo A. madero; después de ahí mi compadre se desapareció se vino para Rioverde yo me quede, con tanta suerte que me encuentro con unos amigos que llegaron preguntando quien les podían arreglar una camioneta y me recomendaron a mí, se las pinte, cuando fueron por ella me dice el Sr. Mire yo soy el gerente de compras y de mantenimiento de una empresa gasera y queremos haber si nos sigue arreglando los camiones porque nos gustó su trabajo, le consteste que claro que si, lo único era que tenía que hasta santa clara por los camiones para arreglarlos, desgraciadamente un día nos robaron en el taller y me robaron mi equipo de autógena, mi arma principal y nos quedamos mal; entonces fui y le dije al Sr. Rodríguez que me prestara un dinero para poder comprar lo que me habían robado, y me contesto que lo iba a comentar con su patrón, al otro día regresa y me dice: -sabe que: ya le conseguí el crédito, si le prestan los 3 mil pesos pero el patrón dice que la condición es que se vaya a trabajar allá a la empresa, esto lo platico con mi hermano y a mi cuñado que estaban conmigo: -  como ven nos vamos?,  -Pues vámonos-, en el mismo camión nos fuimos  para la empresa; ahí dure 45 años la empresa se llama flamagas S. A.; desgraciadamente la vendieron, yo me Salí antes porque no me gusta estancarme en un lugar.

Anduve trabajando en diferentes lugares recuerdo que trabaje atrás de la doble w, ahí tuve la oportunidad de conocer cantidad de amigos, conocí a Javier Solís, a lola Beltrán, a tomas Méndez, a Alfredo Jiménez, con el me di el lujo hasta de emborracharme.

Después el hijo del patrón donde trabajaba me mandó llamar y me pidió que me fuera nuevamente a trabajar con ellos, lo cual acepte y regrese con ellos, y un día me dijo: -oye olivo necesito que te vayas a Huatulco- y le digo:  -y que voy a hacer allá- y me dijo: -quiero que me vayas a reparar una lancha-, yo en ese tiempo ya trabajaba la fibra de vidrio por eso me lo pidieron,  me dijo: -mira vas a ir nadamas por 15 días vas reparas unas lanchas y te vienes y ya después vas a ir cada mes a ver que se necesita-, esos 15 días se convirtieron en 25 años los que dure ahí, para mi Huatulco es como mi segunda patria hice amigos que hasta la fecha todos me estiman y seguido voy tanto que le hice un poema, en estos días lo voy a publicar porque una niña de ahí que me quiere mucho casi casi como un padre anoche me hablo y me dijo: -don olivo que bonito poema mando hágame uno para Huatulco- y le dije: -hija, ya lo tengo ya lo he publicado varias veces y nuevamente lo voy a publicar exclusivamente para usted-,  ahí la gente me quiere mucho y tengo cantidad de amigos

Mi casa está en el estado de Mexico vivo en una colonia que se llama ojo de agua es por la carretera a Pachuca delante de san Cristóbal Ecatepec ahí tienen ustedes su casa es una colonia muy bonita muy tranquila ahí vivo nada mas con dos nietos porque mi esposa tiene treinta tantos años que murió y vivo con mis dos nietos porque también se quedaron solos porque su mama hace 2 años que murió entonces como ellos Vivian conmigo pues ellos siguieron viviendo conmigo

Las raíces de mi esposa están en san francisco de asís ellos son los moreno aquí en Rioverde me la encontré yo la veía pasar diariamente y me enamore de ella estudiaba corte con una señorita hija o hermana de don Antonino Márquez que tenía su casa y su carnicería mero enfrente de la casa de don Perfecto Domínguez y me le  pegue y me le pegue hasta que cayo y al año nos casamos, nos casamos en Ciudad Fernández porque en aquel tiempo el sacerdote el padre Félix madrazo cobraba muy caro y no había dinero suficiente, entonces allá me hizo favor de casarme el padre Salvador Guillen que también había sido condiscípulo de escuela aunque más arriba porque él era mayor que yo, el me conocía y con él me case; por lo civil me caso Chavelita, me caso en la calle matamoros en aquel tiempo iban a domicilio y en ese tiempo Chavelita fue y recuerdo que el juez civil era don Paulito Martinez.

 A los 5 años de casado me fui para Mexico yo tuve 7 hijos de los cuales en la actualidad sobreviven 4 de ellos tengo 14 nietos y 7 bisnietos pero yo vivo con 2 nietos de mi hija mayor

Yo estoy ahorita nada mas con el de arriba yo vivo de lo que me dan mis hijos y tengo muchos amigos aun en ocasiones que se necesitan trabajos y les envío a mis amigo me dan alguna comisión y aparte el patrón también lo hacía yo en una ida de un mes me ganaba de 30 a 35 mil pesos muy buenos pero cosa que deje de percibir ya y ahorita pues ya me veo apurado en esta vez yo tenía muchas ganas de  venir pero no tenía con qué y me dice mi nieto oye abuelo: -vas a ir a Rioverde? y le digo: -ganas no me faltan pero me falta con qué- y me dice: -abuelo, vas a dejar  pasar esta oportunidad de que estés con tus amigos?, y que me dan la sorpresa me dijeron: -te vas a Rioverde-, y entre mis dos nietos me dieron y gracias a ellos estoy aquí y primero dios el 25 de septiembre me voy con uno de mis nietos me voy con él a Mérida.

Y así sigue Don Lamberto contando, viviendo y compartiendo con la gran cantidad de amigos y de recuerdos que lo acompañan todo el tiempo; sígale don Lamberto siga con esas ganas de vivir y aquí lo esperamos en su Rioverde querido.