La Sra.
Chatita, como cariñosamente se le conoce, nace en el Municipio de Cd.
Fernández, S. L. P., un 4 de mayo de 1943, siendo la segunda de tres hno.
Llevando desde temprana edad una vida de Obediencia y compromiso. Realiza un
curso de primeros auxilios que le ayudo mucho en sus nobles ideales, a los 20
años se casa con el Sr. Esteban González Torres, siendo madre de 9 hijos con
mucho orgullo, la mayoría profesionistas la cual comenta fue una época de muy
difícil economía, apoyo a su esposo haciendo pasteles, bordando y sin descuidar
las actividades de la vida cotidiana.
Siempre ha sido una mujer sencilla, alegre y trabajadora, sin rendirse
ante las adversidades, con muchos valores como la tolerancia y la generosidad.
Su bondad, sus obras, sus pensamientos, han sido siempre encaminados hacia el
bien común, feliz de ser útil a los
demás, llevando a cabo una gran obra de servicio, movida por el amor, con gran
capacidad de moverse con benevolencia y humildad, a favor de los más
desfavorecidos, como personas solas, enfermas y psiquiátricas, asea a ancianos
que están postrados y una palabra de aliento para quien este triste, siendo un
bello ejemplo, para los 75 miembros de su familia, en los que ha sembrado la
semilla del amor y del servicio, estando todos sus hijos, tratando de imitar,
la vocación tan hermosa de su madre. Otro ejemplo de su bondad, es que sus
hijos, con mucho esfuerzo le abrieron una farmacia, misma que duro muy poco
debido a su desprendimiento por las cosas materiales, atendía, inyectaba y les proporcionaba
medicamento, sin siquiera conocer a las personas, quedando de regresar a pagar
y claro que fueron muy pocas las personas que regresaron. Como mujer de fe, ha
apoyado desde joven en su parroquia, responsable a través de los años de varios
apostolados, así como apoyo incondicional en caritas parroquial y ministro
extraordinario de la eucaristía. Esa alternancia es la que la ha ayudado a
abrir, no solo las puertas de su casa sino también las de su corazón, siempre
con gratitud hacia el todopoderoso, siendo la oración su gran aliada. Todas las
personas que tenemos el honor de conocerla, tenemos un mismo sentir hacia la
Sra. Chatita, es insuperable por su gran calidad humana, demostrando con sus
actos la nobleza de su alma. Ella eligió el camino del servicio, aun en sus
limitaciones y con múltiples esfuerzos, ha sido una luz para cada uno de sus
hijos, siendo testimonio vivo de grandeza y un legado de amor insuperable.
ARCHIVO HISTORICO
DE CD. FERNÁNDEZ, S.L.P.
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